8. Maestro y discípulo

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Maestro y discípulo

Versos 469 - 518

El maestro habla

469

Sólo existe Brahman, el primero sin segundo, cuya verdadera naturaleza es incomprensible, pues está más allá del alcance de la mente y las palabras; en El no hay ni la más mínima dualidad.

470

Sólo existe Brahman, el primero sin segundo, la Realidad, auto-refulgente, auto-existente, pura, inteligente y carente de réplica en el mundo infinito; en El no hay ni la más mínima dualidad.

471

Los Sanyasines de almas elevadas que se han liberado de todo apego y han desechado los placeres de los sentidos, que permanecen serenos y en perfecto autocontrol; realizan esta Verdad Suprema y por fin alcanzan la Dicha Eterna a través de la auto-realización.

472

—El Gurú dice a su discípulo— Tú también, medita en esta Verdad Suprema, la verdadera naturaleza de tu Ser, que es la más pura esencia de la Dicha, y deshazte de la ilusión creada por tu propia mente; sé libre y obtén la iluminación que te permita alcanzar la consumación de esta vida humana.

473

A través del Samadhi, en el cual la mente queda perfectamente concentrada y quieta, haz visible la Verdad de tu Ser con el ojo puro de la realización. Si logras comprender perfectamente el significado de las palabras que escuchas de tu Gurú, ya no puede quedar más duda en tu mente.

474

La experiencia del Atman, el estado puro de Sat Chit Anand, que se obtiene tras romper nuestra conexión con toda atadura a la ignorancia (Avidya), es la prueba más fehaciente que se pueda tener. Después de experimentar esto, las escrituras, las palabras del Gurú y todos los razonamientos previos cobran especial sentido haciéndose fácilmente comprensibles.

475

Apego, liberación, satisfacción, ansiedad, enfermedad, hambre y otras cosas parecidas son estados que sólo pueden comprenderse mediante la propia experiencia personal; el conocerlas sólo a través de lo que otros cuentan es simplemente una inferencia indirecta.

476

Los santones y los Shrutis instruyen y aconsejan a los discípulos desde la orilla, inspirándoles cruzar el océano de la ignorancia, pero el hombre dotado de realización propia cruza el océano de Avidya91 mediante su propia Iluminación y siempre respaldado por la gracia de Dios.

477

Una vez que él conoce su Ser indivisible a través de su propia experiencia, llegando así a la perfección, el hombre debe permanecer cara a cara con el Atman, concentrando su mente constantemente en él tras dejar a un lado su dualismo.

478

El veredicto de todos los tratados de la sabiduría Vedanta, es que el Jiva y el universo entero no son otra cosa más que Brahman, y que liberación significa morar en Brahman, el Ente indivisible. Los Shrutis mismos son la autoridad que afirman que Brahman es el Primero sin segundo.

479

Experimentando la Verdad Suprema a través del Conocimiento revelado por el Gurú, el discípulo, con sus sentidos en calma y su mente concentrada, permanece inmóvil y perfectamente enfocado en el Atman.

480

Después de concentrar la mente por algún tiempo en el Supremo Brahman, él volvió a la conciencia ordinaria saliendo de la Dicha Suprema y habló así:

481

Mi mente se ha disipado, y todas sus actividades se han desvanecido al realizar la identidad del Ser y Brahman; ya no queda en mí ningún vestigio de dualidad y comprendo el juego armónico de los pares opuestos. Ahora sé qué es la Dicha y no encuentro límite a la experiencia de Samadhi.

482

Realmente es imposible expresar con palabras o conseguir con la mente la majestad del inconmensurable océano del Supremo Brahman, repleto de Néctar; es la Dicha del Ser. Mi mente se sumergió en una fracción infinitesimal de ese océano disolviéndose en él como si fuera un granito de sal. Ahora estoy completamente satisfecho experimentando la esencia de la Dicha.

483

¿Por dónde desapareció el universo? ¿quién se lo llevó? ¿en qué se diluyó? Hace muy poco podía verlo, pero para mí ya ha dejado de existir ¡Qué descubrimiento!

484

El océano de Brahman está repleto del néctar de la Dicha Absoluta e infinita ¿qué hay en él que se pueda desechar y que se pueda aceptar? en ese estado no existe otra cosa más que el propio Ser, esa esencia indiferenciada e indiferenciable.

485

En ese estado yo no puedo ver ni oír ni saber nada; simplemente existo como el Ser; la Dicha Eterna que es el soporte de la creación entera.

486

Me postro una y otra vez ante ti, oh noble maestro, tú estás libre de apego y eres el mejor entre todas las buenas almas, eres la manifestación física de esa Dicha Eterna; el primero sin segundo, eres infinito, eres un inagotable océano de misericordia.

487

Tu mirada centelleante, igual que el resplandor de un haz de rayos de luna, me ha liberado de la pesada carga de todas las aflicciones que me causa este mundo, y en segundos me has aceptado y me has llevado al perfecto estado de la realización del Atman, la dicha de majestad infinita.

488

Bendito soy; he alcanzado la culminación de mi vida y ya estoy libre del sometimiento a la transmigración. Soy la esencia de la Dicha Eterna, soy infinito, y todo esto lo debo a tu gracia y a tu infinita misericordia.

489

Me has desapegado de mis conceptos, mis ideas, mi ego, y mi cuerpo físico. Tú me has liberado también de mi cuerpo sutil y me has llevado a un estado imperecedero, sereno, infinito, inmaculado y eterno.

490

Yo no soy actor ni experimentador, soy algo inmutable que está más allá de la actividad; soy la esencia del Conocimiento Puro, soy el Absoluto que se manifiesta como el Bien Eterno.

491

Ya no me siento identificado con el que ve, el que escucha, el que habla, el que hace y el que experimenta; yo soy la esencia del Conocimiento Eterno, soy la esencia constante que está más allá de la actividad, desapegada, carente de limitaciones e infinita.

492

Ya no soy ni esto ni aquello, sólo lo supremo, el que lo ilumina todo; en verdad soy Brahman, el primero sin segundo, puro, carente de exterior e interior, infinito.

493

En realidad soy Brahman, el primero sin segundo, el incomparable, la Realidad que jamás tuvo un principio y que está más allá de imaginaciones tales como "tú" o "yo", o "esto" o "aquello"; la esencia de la Dicha Eterna, la Verdad.

494

Yo soy Narayana, el exterminador de Naraka92, soy shiva el exterminador de Tri-pura93; soy el Ser Supremo, el Gobernador. Soy el Conocimiento Absoluto, el Testigo de todo. No tengo a otro gobernante que a mí mismo ya que estoy libre de ideas como yo y mío.

495

Yo soy el Conocimiento que reside dentro de todos los seres y que los mantiene tanto interna como externamente. Soy tanto el experimentador como el objeto de experiencia, incluso todo aquello que yo antes consideraba como "esto" o el no Ser.

496

Sabiendo ahora que soy el infinito océano de la Dicha Eterna, observo el juego de los ilusorios vientos de Maya creando y destruyendo las diferentes olas que azotan el océano del mundo.

497

Las ideas de lo grosero y lo sutil son imaginaciones erróneamente concebidas por la mente mundana, a través de la manifestación de las cualidades sobreimpuestas, pero en realidad no son más que imaginaciones ilusorias igual que concebimos los ciclos, los años, los meses, las estaciones, etcétera, como atributos del tiempo.

498

Pero por más que los necios e ignorantes imaginen y sobre-impongan cualidades groseras, el substrato real permanece siempre intacto. Las grandes corrientes de agua que —por alucinación— forman los espejismos del desierto, no mojan ni al más diminuto grano de arena.

499

Al igual que el cielo, estoy más allá de la contaminación, soy una esencia inmutable e inmóvil como una montaña, distinto de los planetas, las estrellas y los soles; soy infinito como un océano sin orillas.

500

Igual que el cielo no tiene ninguna relación con las nubes, yo tampoco tengo ninguna relación con el cuerpo. Así pues, ¿cómo pueden los estados de vigilia, sueño con ensueño y sueño profundo, que son meros atributos del cuerpo, afectarme a mí?

501

Lo que viene y se va es el upadhi (cualidad sobreimpuesta), él es el que actúa y experimenta los trucos de la acción, solo él decae y muere; mientras que yo siempre permanezco firme igual que el Monte Kula.

502

Para mí, que siempre he sido, soy y seré la misma entidad carente de partes, no existe ni atracción ni rechazo hacia la acción. ¿Cómo puede haber lucha dentro de esa Esencia única, continua e infinita como el espacio?

503

¿Cómo pueden existir méritos y deméritos para mí, que soy una Esencia carente de órganos, mente, formas y cambios?: soy la Realización de la Dicha Absoluta. También los Shrutis afirman lo mismo en el pasaje: "inafectado por el mérito, etcétera".

504

Si se diera el caso de que el calor o el frío, o el bien o el mal, pudieran tocar la sombra del cuerpo de un hombre, esto no le afectaría a él en lo más mínimo, porque es un ser completamente distinto de su sombra.

505

Igual que las cualidades de los objetos que decoran una sala no afectan a la lámpara que la ilumina, de la misma forma las cualidades de los objetos observados por el Testigo, que es distinto de ellos, inmutable e indiferente, no le afectan en absoluto.

506

Igual que el sol permanece indiferente como un mero Testigo ante las acciones de los hombre, y al igual que el fuego quema todo lo que encuentra a su paso sin distinción, e igualmente que a la soga se le puede atribuir una cualidad sobre-impuesta (confundiéndola con una serpiente) sin que por eso cambie en absoluto su verdadera naturaleza; de la misma forma yo afirmo que soy el Ser inmutable, la Inteligencia absoluta.

507

Yo no realizo acciones ni hago que otros las realicen; yo no disfruto de este mundo ni hago que otros lo disfruten; yo no veo ni hago que otros vean: Yo soy ese Ser auto-refulgente que trasciende el alcance de los sentidos. Soy el Atman.

508

Al moverse el upadhi (cualidad sobreimpuesta) que refleja las cualidades del Atman aparentando ser suyos, los necios atribuyen dicha acción al Atman, como ocurre con las ideas y conceptos elaborados por el Buddhi (intelecto); llegando a conseguir ideas tan erróneas como "yo soy el actor", "yo soy quien experimenta", o "¡Ay; que me matan!". Cuando se agita el agua de una charca, el reflejo del sol sobre la superficie del agua también se agita con ella, pero sólo los necios pueden atribuir dicho movimiento al sol mismo.

509

No importa que este cuerpo caiga al agua o sobre la tierra, no me afectan sus cualidades, igual que al espacio no le afectan las cualidades de la jarra.

510

Los estados transitorios del Buddhi, tales como el actuar, el experimentar, el desear, la embriaguez, la abulia, el apego, y el deseo de libertad; en realidad nunca pertenecen al Ser, el Supremo Brahman, el Absoluto, el primero sin segundo.

511

No te importe que Prakriti94 cambie en diez, cien o mil formas diferentes ¿Qué tengo que ver yo, el intocable Conocimiento Absoluto, con todas ellas? ¡ Las nubes jamás tocan el cielo!

512

Yo soy realmente Brahman, el primero sin segundo, que al igual que el cielo, es sutil, sin principio ni fin; en lo que el universo entero, desde lo inmanifestado hasta el cuerpo grosero, aparece para el ignorante meramente como una sombra.

513

Yo soy realmente Brahman, el primero sin segundo, que es el soporte de todo e ilumina todas las cosas, que tiene infinitas formas y al mismo tiempo carece de multiplicidad; es omnipresente, eterno, puro, inmóvil y absoluto.

514

Yo soy realmente Brahman, el primero sin segundo, que trasciende las infinitas diferenciaciones de Maya, siendo la verdadera esencia de todo y que está más allá del alcance de la mente y los sentidos; es la Verdad, el Conocimiento, el Infinito y la Dicha Absoluta.

515

No participo en la acción, soy inmutable, carente de forma y partes; absoluto, eterno, auto-existente, el primero sin segundo.

516

Soy lo universal, soy el Todo, soy trascendente, lo primero sin segundo. Soy lo Absoluto y lo Infinito, soy el Conocimiento y la Dicha; soy la unidad indivisible.

517

Por virtud de la suprema majestad de tu gracia he recibido la experiencia del esplendor del soberano Ser auto-refulgente dentro de mí. Me postro ante ti, oh glorioso y noble Maestro. ¡Salutaciones una y otra vez!

518

¡Oh Maestro!, exclusivamente por tu pura gracia me has despertado del sueño de la ignorancia y me has salvado completamente, yo vagaba por el bosque perdido en un sueño interminable de nacimiento, decrepitud y muerte, creado por la ilusión. Día tras día era atormentado por incontables aflicciones y mi corazón era amargamente desgarrado por la zarpa de ese tigre del egoísmo.

 

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