1. Primeros pasos en el camino

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Prólogo

Versos 1 - 15

1

Me inclino ante Govinda11, que es el Satguru12 y cuya naturaleza es la dicha suprema, a quien sólo se puede comprender una vez que se ha realizado el Conocimiento Supremo descrito en el Vedanta ,. pues está más allá del alcance de las palabras y el pensamiento.

2

Muy difícil es para cualquier criatura obtener un nacimiento en forma humana; pero más difícil aún es que nazca como varón; aún más raro es que nazca en una familia de Brahmanes; y aún más raro es que se dedique por completo a la religión verdadera y eterna; más todavía, es que comprenda las escrituras llegando a ser un entendido en ellas; y más que todo, que aprenda a discriminar entre el Ser y el no-Ser y permanezca continuamente en estado de identidad con Brahman.13 Esta clase de mukti (liberación) no se obtiene más que a través de los méritos que se gana un alma con tesón, durante cientos de miles de nacimientos.

3

Ciertamente hay tres cosas que son muy difíciles de obtener y que se consiguen solamente por la gracia de Dios, son: obtener un nacimiento humano, sentir anhelo por alcanzar la liberación y el cuidado y protección de un sabio perfecto.

4

Aquél que después de haber nacido con un cuerpo humano14 —especialmente si es varón15— obtiene el Conocimiento del que hablan los Vedas; si como un necio no hace esfuerzo alguno por obtener la liberación, es como si se suicidase. Ese hombre se labra su propia destrucción apegándose a este mundo irreal y a los objetos transitorios.

5

¿Hay alguien más estúpido que aquel que después de haber obtenido excepcional-mente un cuerpo humano en forma de varón, se deja llevar por la pereza y no hace el debido esfuerzo por realizar el verdadero propósito de esta vida?

6

Aunque se conozcan todas las escrituras y se realicen todos los cultos y adoraciones a las distintas deidades, de nada vale todo eso a menos de que se experimente identidad con el Atman16 a través del Conocimiento Supremo; y de ninguna otra manera se puede experimentar esa identidad ni aunque viviera durante cien Brahmas juntos.

7

No hay esperanza alguna de alcanzar la inmortalidad mediante la acumulación de riquezas, así lo declaran los Vedas. Y también explican muy claramente que las acciones por sí solas no pueden ser la causa de la liberación.

8

Por eso, el hombre lúcido hace tanto esfuerzo como puede por alcanzar la liberación. Después de renunciar al deseo de placer que provoca en él los objetos externos, acercándose debidamente a un Maestro bueno y generoso, fija su mente en la verdad que él le revela.

9

Una vez alcanzado el estado de Yogarudha17 , por medio de la devoción al Maestro y el correcto discernimiento, uno queda libre del nacimiento y la muerte.

10

Que el sabio y el lúcido, una vez que haya comenzado la práctica del conocimiento del Atman, renuncie a todos los frutos de sus acciones e intente cortar para siempre los lazos que lo atan al nacimiento y la muerte.

11

Las acciones sólo nos ayudan a purificar la mente, pero no a perseguir la Realidad. La realización de la Verdad se obtiene mediante el discernimiento, jamás mediante la acción; ni aunque realizásemos diez millones de acciones.

12

Mediante el discernimiento18 adecuado se obtiene el conocimiento de qué es la Realidad, del mismo modo que se pone fin al tremendo miedo y angustia que causa en una mente confusa la forma de una soga al confundirla con una serpiente.

13

La convicción sobre la Verdad, sólo nos vendrá comprendiendo los sanos consejos del Maestro, no bañándonos en las aguas sagradas, ni haciendo donativos, ni tampoco mediante cientos de Pranayamas19.

14

El éxito de este camino depende esencialmente de que el aspirante esté bien preparado. El tiempo, el lugar y los demás aspectos de esa índole son factores meramente secundarios.

15

Por lo tanto, el buscador de la Realidad Suprema que yace en el Atman, debe dedicarse a la introspección después de haber suplicado humildemente la gracia de su Gurú , que es un océano de misericordia y el mejor de los conocedores de Brahman.

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Las cuatro perfecciones

Versos 16 - 34

16

El hombre lúcido y claro que comprende la esencia de la que hablan todas las escrituras —pudiendo por ello argüir en favor de su contenido y refutar todos los argumentos en contra— es considerado como un digno recipiente del Conocimiento del Atman.

17

El hombre que sabe discernir entre lo real y lo irreal, cuya mente se ha apartado de lo irreal haciéndole poseedor de la paz de espíritu y todas las virtudes que ésta conlleva, y siente un profundo anhelo por la liberación; sólo este hombre puede considerarse calificado para hablar sobre Brahman.

18

Concerniente a esto, los sabios han hablado de cuatro medios para alcanzar este estado; sólo cuando se poseen estos cuatro medios puede alcanzarse devoción por Brahman, de lo contrario nuestro intento será fallido.

19

El primero es la capacidad de discriminación (viveka) entre lo real y lo irreal; el siguiente es la renuncia (vairagya) al goce de los frutos de nuestras propias acciones, tanto aquí como en el más allá; después de éste, viene el grupo de los seis atributos, (tranquilidad, ecuanimidad, entrega, constancia, fe y amor); y por último los sabios hablan muy claramente sobre el anhelo sincero por alcanzar la liberación (Mumukshuta).

20

Al firme estado de convicción de que Brahman es lo real y que el universo es lo irreal, se le llama Viveka (discernimiento entre lo real y lo irreal).

21

Vairagya o renunciación es el deseo de renunciar a todos los goces transitorios que se dan dentro del espectro de experiencia perceptible, que va desde el mero hecho de tener un cuerpo vivo, hasta los que se obtienen una vez alcanzado el estado de Brahma, mediante las prácticas espirituales o bien recibiendo instrucciones del Maestro.

22

La práctica de mantener la mente fija sobre su meta (Brahman), después de haberla separado de los diVersos objetos de los sentidos mediante la continua observación de los defectos que éstos tienen, se llama Shama o calma.

23

A la práctica del autocontrol se le llama Dama, y consiste en retirar los órganos de la acción (las cuerdas vocales, las manos, las piernas, los órganos genitales y de la evacuación) y también los del conocimiento o percepción (los ojos, la nariz, los oídos, la lengua y la piel) de aquellos objetos que los atraen dirigiendo la energía hacia sus centros respectivos, a lo cual se llama Uparati. El mejor uparati o recogimiento, consiste en no permitir que la mente se excite ante los estímulos de los objetos externos.

24

El sobrellevar todo tipo de aflicciones sin preocuparse en deshacerse de ellas, permaneciendo al tiempo en una actitud ecuánime, libre de ansiedad o lamentación, es lo que se conoce con el nombre de Titiksha o impertubabilidad.

25

Los sabios llaman Shradha o fe a la verdadera aceptación de las instrucciones contenidas en las escrituras y especialmente las impartidas por el Gurú, una vez comprobada su veracidad a través de la práctica y de la propia experiencia.

26

El constante reposo interior o Samadha, no se obtiene mediante el análisis intelectual ni el procesamiento de la experiencia a través del pensamiento en una búsqueda curiosa de explicación sino que, por el contrario, se obtiene eliminando todo tipo de pensamiento o proceso intelectual, concentrando toda la atención en el siempre puro Brahman

27

Mumukshuta o ardiente anhelo por la liberación, es el constante deseo de liberar nuestro verdadero ser de todas aquellas ataduras sobreimpuestas, debido a nuestra ignorancia, que comienza al asociarnos con nuestro ego ilusorio y nuestra identificación con nuestro cuerpo físico.

28

Incluso un ser torpe o mediocre, a través de este profundo anhelo por la liberación y mediante la gracia del Gurú, puede alcanzar la realización mediante el Vairagya (renunciación) , Sama (calma), y los demás.

29

En estos casos en los que la renunciación y el anhelo de liberación son realmente intensos, la calma y las otras prácticas tienen verdaderamente valor y dan sus frutos.

30

Pero, en el caso de que la renunciación y el anhelo de liberación sean escasos o débiles, la calma y las otras prácticas no serán más que una mera apariencia, igual que un espejismo en un desierto.

31

Entre todas las vías que puedan conducir a la liberación, la devoción Bakti20 es la única que ostenta el lugar primordial. La búsqueda de nuestra naturaleza real es lo que se designa como devoción.

32

Otros defienden que la devoción es la búsqueda de la Verdad dentro de nuestro propio ser. El buscador de la verdad del Atman que posee los medios o cualidades anteriormente mencionados, debe acercarse a un Maestro sabio que le confiera la emancipación de la ignorancia.

33

Aquel que conoce la esencia de los Vedas, está limpio de todo pecado y ha superado el deseo, siendo, además, un conocedor de Brahman por excelencia, hasta el punto de haberse sumergido completamente en él. Es tranquilo como el fuego que ha consumido su combustible; es un infinito océano de misericordia sin razón ni justificación y un amigo fiel de todo aquel que se postra ante él.

34

Después de adorar al Gurú con devoción, tras haberle servido con humildad, uno debe acercarse a él cuando esté complacido, y postrándose ante él debe pedirle lo que tiene que conocer diciendo:

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La apelación al Yo Superior

Versos 35 - 40

35

Oh, Maestro, oh amigo de aquellos que se postran ante ti, tú eres un océano de misericordia y yo me postro ante ti; por favor, sálvame del océano de nacimientos y muertes en el que he caído, por favor, concédeme una mirada de tus brillantes ojos que derraman una gracia tan sublime que parece Néctar.

36

Sálvame de la muerte; afligido estoy, como me ves, por el fuego insaciable del deseo que consume el bosque de este mundo. Estoy siendo sacudido violentamente por los vientos del Karma que he acumulado, tengo miedo y vengo a buscar refugio en ti porque no conozco a ningún otro ser que me pueda servir de amparo.

37

Hay almas buenas, ecuánimes y magnánimas que una vez que han cruzado el terrible océano de nacimientos y muertes —al igual que la primavera— hacen el bien ayudando a otras almas a cruzar también el mismo océano, sin ningún motivo en absoluto.

38

Es la misma naturaleza de esta alma magnánima lo que la mueve por voluntario deseo a quitar el sufrimiento que atormenta a los hombres. Igual que la luna salva a la tierra azotada por los abrasadores rayos del sol.

39

Oh, Señor —dice el discípulo—, sufriendo estoy por los tormentos de las aflicciones mundanas, que son como lenguas de fuego devorando un bosque, por favor, rocíame con tus palabras de néctar endulzadas con el gozo del elixir de dicha llamado Brahman; puras, refrescantes y deliciosas para mis oídos. Benditos son aquellos sobre los que paseas la mirada de tus ojos luminosos aceptándoles como tuyos.

40

Yo no sé como cruzar este océano de existencia fenoménica, no sé cuál es mi destino ni de qué medios he de valerme. Por favor, sálvame, ¡Oh, Señor! , y descríbeme ampliamente como acabar con la miseria de esta existencia transitoria.

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El comienzo de la enseñanza

Versos 41 - 71

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Alumno–Maestro

El discípulo pregunta

41

Mientras (el discípulo) habla así, atormentado por las aflicciones de este mundo, que son como el fuego que devora el bosque, buscando protección en el Maestro; los ojos del Santo depositan su mirada en él suavizando su pena e invitándolo espontáneamente a deshacerse de todo tipo de miedo.

42

A aquél que busca su protección sediento de liberación y que obedece con respeto los consejos de las escrituras, cuya mente está serena y su corazón confiado; a éste el Maestro le revela el Conocimiento de la Verdad por pura gracia.

El maestro responde

43

No temas bienaventurado —responde el Maestro—, no habrá muerte para ti; hay un medio de cruzar este océano de existencia transitoria. Te revelaré el mismo camino, que en otros tiempos pasados llevó a muchos sabios a través de este océano hasta la otra orilla.

44

Hay un Conocimiento Supremo que acaba con el miedo que nos produce esta existencia transitoria; valiéndote de él cruzarás el océano del Sansara21 y alcanzarás la Dicha suprema.

45

La comprensión de la esencia profunda del Vedanta [1a, 1b, 1c] nos aporta un conocimiento útil y eficaz, y cuando tenemos la experiencia práctica de ese conocimiento, inmediatamente desaparece la miseria que proviene de esta existencia transitoria.

[1a. en.wikipedia.org/wiki/Advaita_Vedanta ]

[1b. es.wikipedia.org/wiki/Advaita ]

[1c. es.wikipedia.org/wiki/Vedas ]

46

Para un verdadero buscador, la fe (Shadha), la devoción (Bakti) y el yoga de la meditación son los factores inmediatos que conducen a la liberación, como bien explicaban los Shrutis22. Quienquiera que posea estos factores, alcanza la liberación de la atadura al cuerpo físico, provocada por la ignorancia.

47

Cierto es, que por influencias o ignorancia, tú, que eres el Ser Supremo, te encuen tras sometido a la atadura de la Maya , lo cual te somete al ciclo interminable de nacimientos y muertes. Pero una vez que el fuego del Conocimiento ilumina tu discernimiento permitiéndote diferenciar estos dos aspectos, todos los efectos de la ignorancia desaparecen al desaparecer su propia raíz.

48

Ten la bondad de escucharme —dice el discípulo—, oh, Maestro, hay una pregunta que quiero hacerte y estaré muy agradecido de escuchar una respuesta de tus labios.

49

Dime, ¿qué es esa atadura? ¿cómo le sobrevino al Ser? y ¿cómo es que aún continúa existiendo? ¿cómo puede uno liberarse de ella? ¿qué es este ego? y ¿quién es el Ser Supremo?, ¿cómo podré diferenciarlos? Por favor, háblame de todas estas cosas.

50

¡Bendito eres! —respondió el Maestro—. Tú has alcanzado la meta de tu vida, santificando así a tu familia, y ahora deseas convertirte en un brahmán liberándote de la atadura a la ignorancia.

51

Un padre tiene a sus hijos y a los demás para que le liberen de sus deudas, pero sólo él puede liberarse a sí mismo de sus ataduras.

52

Problemas tales como el tormento que causa el peso que se transporta sobre la cabeza, pueden ser aliviados por otros. Pero nadie más que uno mismo puede acabar con el sufrimiento que nos produce el hambre y las necesidades de esa índole.

53

Sólo el enfermo que adopta una dieta adecuada y toma las medicinas convenientes logra restablecerse completamente, de ninguna forma le ayuda lo que los otros hagan.

54

La verdadera naturaleza de las cosas sólo se conoce mediante la experiencia personal, a través de un ojo claro e iluminado, no mediante las descripciones hechas por otros, incluso aunque se tratara de un sabio; el verdadero aspecto de la luna solamente se puede conocer mediante nuestros propios ojos.

55

¿Quién más que uno mismo puede liberarse de la atadura que nos encadena a la ignorancia, al deseo, a la acción, al mundo? Si esperamos que otros hagan ese esfuerzo por nosotros no lo conseguiremos ni en mil millones de Kalpas.

56

Ni tampoco mediante el Yoga, ni mediante el Samkya23, ni tampoco mediante las acciones, ni las lecturas, ni la acumulación de habilidades y experiencias: sólo mediante la experiencia práctica de nuestra identidad con Brahman se alcanza la liberación, y por ningún otro medio.

57

La belleza de la forma del Sitar24 y la habilidad para producir notas armoniosas con sus cuerdas, sólo sirve para complacer a unas cuantas personas, pero de ninguna forma puede llevarnos a la realización espiritual.

58

Hablar en público exhibiendo nuestra cultura y conocimientos, al igual que la habilidad para explicar las escrituras, y todas las demás artes oratorias y cualidades de este estilo; tan sólo provocan un pequeño goce personal al orador, pero de nada sirven para alcanzar la liberación.

59

El estudio de las escrituras es inútil si no se tiene la experiencia práctica de la Verdad Suprema; y siguen siendo igualmente inútiles una vez conocida la Verdad Suprema.

60

Las escrituras, tan llenas de palabras, son como un denso bosque en el cual la mente pierde su rumbo. Por eso, el hombre dotado de sabiduría, debe dedicarse con anhelo a profundizar en la experiencia de la verdadera naturaleza de su ser.

61

Para aquel que ha sido mordido por la serpiente de la ignorancia y sufre los efectos de su veneno, el único remedio es el Conocimiento de Brahman. De nada le sirven los Vedas, ni las otras escrituras, ni los mantras , ni las medicinas.

62

Nadie se cura de una enfermedad por el mero hecho de repetir el nombre de la medicina, sin tomársela; igualmente, sin la experiencia directa de ese Poder Supremo nadie puede liberarse, por más que repita la palabra Brahman.

63

Sin comprender la naturaleza ilusoria del universo objetivo y sin conocer la verdad del Ser, nadie podrá liberarse repitiendo la palabra Brahman, o cualquier otro mantra; no tendría más valor que un mero esfuerzo de articulación vocal.

64

Sin haber destruido a todos sus enemigos y poseer la gloria de gobernar todo el territorio circundante nadie se convierte en emperador por más que repita: "Soy el Emperador".

65

Para la extracción de un tesoro que se encuentra escondido bajo tierra hace falta recibir antes las debidas instrucciones y comenzar a excavar de forma adecuada, apartando del terreno las piedras, arbustos y demás cosas que puedan ser un obstáculo en la brecha que se ha de abrir hasta poder dar con el tesoro; es obvio que no saldrá por sí solo; por el mero hecho de llamarlo por su nombre. De la misma forma, la transparente Verdad del Ser, que se halla oculta tras la Maya y sus efectos; sólo se puede alcanzar siguiendo las instrucciones de un Conocedor de Brahman, llevándolas luego a la práctica a través de meditación, de Satsang25, de reflexión, jamás mediante vanas discusiones.

66

Así pues, el sabio debería esforzarse en poseer esos medios, en su intento por liberarse de la atadura a los repetidos nacimientos y muertes; incluso en caso de. enfermedad y situaciones adversas.

67

La pregunta que me has hecho hoy, es excelente. Todos los conocedores de las escrituras la aprobarían; bien encaminada, valiosa y adecuada para todos aquellos que buscan la liberación.

68

Ahora escucha atentamente lo que te voy a decir. Al oírlo quedarás libre instantáneamente de la atadura del Samsara.

 

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